jueves, 29 de diciembre de 2011

SE VA



¡¡¡¡ADIÓS!!!!



P.D. Ha sido largo, duro, revelador, por momentos sorprendente.


Me quedo con Senegal, con la muestra viva de que aún hay ilusión, me deshago

de los negativos y de las malas noticias.


Gracias por estar ahí: Noel, Ingrid, anónimos.


viernes, 23 de diciembre de 2011

SUSPIRO



Después de sentirme las últimas semanas como si llevara el AVE metido dentro, por fin, porrrrr finnnnn, han llegado unos días de descanso.


Por momentos siento que quiero dormir, me despierto y quiero volver a dormir.


El coraje surge en los momentos bajos, cuando más se necesita, nunca se sabe hasta donde somos capaces de llegar. Pero abrir los ojos, sonreir y levantarte cada mañana, es señal de que esperas algo, preparas la antesala, aguantas las ganas de ir al baño, miras hacia el futuro y lo que ves es una gran caja envuelta en papel de regalo rosa chillón, te acercas y escuchas un latido fuerte y profundo, la hueles y llegas a captar que desprende una mezcla de esencias concidas y otras que están por explorar.


Un año más para el recuerdo, un año más para guardar, un año nuevo por delante, un año que ansío comenzar.


¡Felices Fiestas!!!

sábado, 17 de diciembre de 2011

SINSENTIDO



Si fuera un ser virtual nacería programado, de sexo elegido a la carta y físico cambiante, según la época del año.


Sabría donde ir, porque lo habría decidido alguien por mí de antemano, no tendría frío, no tendría sed, no me daría miedo, no me quedaría dormido en el sofá sin motivo.


Daría vueltas y vueltas en un espacio cerrado, comería pasteles gigantes sin empacharme ni ensuciarme las manos, ampliarían las estancias pero no sabría disfrutarlo.


Pero, si empiezo a pensar en todo lo que me perdería: respirar el aire puro, degustar una tortilla, sentir como me rozas y la piel se pone de gallina, ahogarme si corro mucho, descansar las rodillas, ver por todos los lados, elegir la puerta de salida, notar como late el corazón, ver la sangre si me pinchas, prefiero ser esta mortal y vivir al máximo la vida.

jueves, 24 de noviembre de 2011

TINIEBLAS



Ya va llegando el frío, mañanas con nieblas espesas que aislan los ruidos cotidianos de las madrugadas semanales.


Ambiente mágico que consigue transportarme hasta las calles de Londres del siglo pasado.


Sentirte sola y única, creer que no hay más allá, ver sólo 20 centímetros a tu alrededor, sentirte segura porque no te pueden ver, oír únicamente tu respiración.


Dan ganas de sacar los pinceles y ponerle un toque de color, marcarte una firma tipo graffiti, bordear el camino de rojo pasión, darle un toque dorado a los bancos e inventarte un amante con esmoquin brillante, pelo rizado y una boca diciendo "te quiero, mi amor".


sábado, 19 de noviembre de 2011

Jugando

Quiero jugar al parchís, repartir los colores y que me toque el rojo. Sacar un cinco a la primera, avanzar sin tropiezos, contar 20 si te como y sentirme llena, de emociones. Acomodarme en casita, sacar brillo al tejadillo y esperar tu llegada con ansia y regocijo.


Después ejercitarme con el pilla pilla, que correr es lo mío, distancias sin fondo y sin paracaídas. Calentamiento previo, estirar los músculos, salir como una flecha a buscar lo que busco.

Ponerme ropa cómoda y probar la elasticidad, contorsionando nuestro cuerpo de aquí para allá, mi pie en el verde oscuro, tu mano en el azul, haz el pino puente boca abajo, yo haré el saludo al sol.


Y después de tanto esfuerzo, mente y cuerpo a descansar, merecido reposo después de tanto trabajar.








domingo, 6 de noviembre de 2011

EXPERIMENTANDO





Me han contado en una esquina o quizá fue sólo un sueño, que es posible ser humano sin dejar de serlo.


Correr porque me apetece, brincar o hacer el pino, quiero dar saltos de alegría y llorar si tengo motivos.


Ir a un parque alejado una tarde de este otoño, dar de comer a las palomas granos de mijo y trigo.


Desnudarme en verano y lanzarme de lleno al vacío, nadar entre tiburones y tocarles la aleta sin motivo.


Afilarle los dientes al lobo que deambula por el bosque de al lado, con ayuda de una gran lima morada que anestesia y atonta al minuto.


Encontrar tres perritos sin nombre, bautizarlos como "Tú" "Yo" y "Nosotros", enseñarles a darme la patita cada vez que se lo pido, a sentarse, a no ladrar, a ser más como una persona y menos como un perrito.


Y orgullosa con mis logros y mis mil y un mordiscos, volver a mi casa apoyada en bastones de caramelo, por si en un momento dado me apetece descansar, llevarme algo a la boca y de nuevo, disfrutar.


miércoles, 28 de septiembre de 2011

CUENTOS


De pequeñas soñábamos con ser princesas... De esas que estábamos acostumbradas a ver en los cuentos, con sus vestidos largos y vaporosos, con los cabellos rubios, siempre perfectos, con tirabuzones marcados y situados en el lugar exacto.

De esas que tienen los ojos azules, que lloran lágrimas sólo si es por amor, que emanan ilusión si miran por la ventana...

De las que esperaban pacientes la llegada del príncipe azul, porque sabían que era su destino, de las que se pinchaban en la rueca, comían manzanas envenenadas o convivían con enanitos sin mostrar oposición.

Las palabras que leíamos nos transmitían que la vida de esas mujeres estaba centrada en la espera, en la paciencia, en la educación. Quejarse no formaba parte del juego, ¡¡eran princesas!!.

Cierras el libro, te miras en el espejo, coges las tenacillas e intentas construir un tirabuzón que se desmorona, observas que tu melena rubia platino muestra unas raíces negruzcas mezcladas con canas, que tienes las puntas abiertas...

Que ni se percibe el color de tus ojos porque entre las ojeras y una conjuntivitis aguda no queda espacio para albergar ilusión.

Que si miras por la ventana ves al vecino de enfrente y que éste no tiene pinta de príncipe y que no es azul.

Que lo de esperar no lo llevamos muy bien, que la paciencia se nos acaba pronto y que la educación está cotizada.


Por las noches cerramos los ojos y esperamos que sea mañana el día en el que se cruce por nuestro camino una viejecita que nos ofrezca una manzana, deseamos que esté envenenada, deseamos dormir plácidamente hasta que un beso de amor nos despierte y nos muestre que, después de tanta espera, por fin se acabó esa vida solitaria de princesa.