De la red |
Tanta rutina y tanto planear anula al ser humano, lo acomoda en un mullido sofá y desde allí ve pasar los años mientras que siente que vive la vida que le va proyectando la televisión: ese mundo tan irreal que vamos montándonos a falta del real del que nos vamos olvidando.
Adoro la energía que desprenden algunas almas, aquellas que te incitan a seguir sus pasos como abducidos por su estela, que son capaces de derrotar tu cuerpo si se plantan frente a ti con altivez. Por momentos me siento libre siendo su esclava y de repente lo hago mi esclavo al ofrecerle total libertad.
Me gusta tocar las palmas de las manos, vislumbrar a través del tacto la historia personal inacabada del ser que me abre esa puerta sin saber que no podrá volver a cerrarla. Escribir con hechos cuentos para adultos con finales felices, de esos con más miradas sinceras y menos cenas copiosas con perdices.
Deseo empezar de cero, borrar de la memoria los momentos con neblina y organizar cada día una fiesta por el mero hecho de estar viva, celebrar con bailes inventados cada agarrón de manos y proyectar fuegos artificiales cuando los abrazos sean tan profundos que provoquen en mí pólvora prensada con una larga y sinuosa mecha.
Un día de estos cogeré mi mochila, la vaciaré de rutina y la llenaré de energía, recopilaré historias que están por escribir y festejaré cada minuto de vida con relativo alboroto y mucha alegría.
20 comentarios:
Vaciaré la mitad de mí mochila para que entres tú.
;-D
A mí me gustan mis rutinas por ser variadas, pero también me ayuda vaciar mi mochila un par de veces o tres al año. No sé si puedo dar gracias a la vida, pero desde luego sí doy gracias por tener trabajo (aunque también hay un componente de esfuerzo por mi parte).
Lo has escrito con estilo, una maravilla.
Un besito, María :-)
Yo no sé si es por mi ascendente en cáncer o mi terca propensión a lo absurdo jajaja, pero amo mi rutina. Y me cuesta digerir aquellos cambios que no decido y los comienzos que no controlo.
Pero reconozco que las expectativas todo lo joden, es verdad, y a veces los mejores momentos son aquellos que no se planean.
Te envío un besito, hermosa.
Yo no sé si es por mi ascendente en cáncer o mi terca propensión a lo absurdo jajaja, pero amo mi rutina. Y me cuesta digerir aquellos cambios que no decido y los comienzos que no controlo.
Pero reconozco que las expectativas todo lo joden, es verdad, y a veces los mejores momentos son aquellos que no se planean.
Te envío un besito, hermosa.
Entre más años va cumpliendo uno, más entiende que hay que actuar y no planear, porque no sabemos si llegaremos a la fecha planeada.....!
Un beso =))))
las dichosas rutinas que nos hacen seguros en nuestra burbuja
Para salir de ella, hay que reventarla
yo una vez fui estela, el alma de las reuniones... pero me han quedado tantas heridas que estoy encerrada en mi concha...
besos guapa
Qué bonito!
Gracias!
Lo haces muy bien, se trata de buscar el equilibrio.
Besos
Dejar que la vida te sorprenda no está mal, después del desequilibrio que se provoca puedes llegar a sentir tantas sensaciones nuevas...
Un abrazo
Eso es muy cierto, a actuar se ha dicho!
Besos
Recomendación: llevar siempre algo punzante consigo mismo.
Un beso.
Volverás a serlo, esa forma de ser no puede estar encerrada por mucho tiempo.
Besazos
Hermoso texto. Espero que me contagie un poco de su optimismo.
Si sirve para que te lleves un cuarto y mitad, yo satisfecha.
Gracias, Miguel Ángel.
Hola paso de visita por tu blog me parece muy interesante tu entrada, yo soy de las que piensan que la rutina es buena, pero de cuando, en cuando saltarla megusta. Saludos
Y a mi me encantas como eres
como escribes
lindo
simple
claro
como el agua cristalina
beso
Bienvenida! Cada cual se encuentra mejor en un estado: disfruta tu rutina y cuando saltes, pues a seguir disfrutando.
Gracias.
Intento serio, escribiendo y viviendo.
Tu visita siempre completa este rincón.
Besazos
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