jueves, 24 de agosto de 2017

CONSECUENCIAS

De la red

Me incitaste a escribirte una carta un día, así de sopetón, sin pensar muy bien lo que decías ni valorar el peso de tu acción.

Debías creer que yo era una simple mortal y que mis palabras no dirían nada nuevo: letras más letras bienquedas, muertas, yacentes sobre una página en blanco. Nada más lejos de la realidad.

Mis frases esconden pequeños tesoros, son como piedras preciosas formando pulseras, collares, cadenas. Una no tiene sentido sin la anterior o la siguiente, van unidas a lo que pienso y dicen mucho más de lo que parece.

Mi trabajo acaba al entregar la carta, Ahora empieza el tuyo: aprender a leer. No como lo hicieron en el colegio cuando eras pequeño, sino a leer entre líneas, sin distraerte, buscando detalles que iluminen tus días o sentencias brutales que te remuevan las tripas.

Me incitaste a escribirte una carta un día, así de sopetón, como el que pide agua en el bar de la esquina pensando que el agua es agua se mire por donde se mire: que cae del cielo, que se arrastra por los ríos, que se envalentona en mares y océanos, que te limpia y también te quita la sed. Aguas que si no son tratadas provocan enfermedades mortales que acaban de golpe con tus ansias de beber.

Cartas, ganas, letras, tesoros, frases, agua, en definitiva, el comienzo de un conocimiento más hondo.

12 comentarios:

Noelplebeyo dijo...

Miraré el buzón

Besos

Siciality dijo...

Provoca sed signorina...
Sus tesoros , sus misterios.
Quien pudiera beber....
Beso curioso
S

ana dijo...

Me gusta leerte y acabo de descubrir que tus letras son piedras preciosa, joyas... Por eso me gustan tanto. Un abrazo

Liliana dijo...

Chanfle!

...no hay que preguntar lo que no se quiere saber!!!

O sí quiere saber???

Besos en el buzón =)))

ოᕱᏒᎥꂅ dijo...

yo vivo un tiempo que era una ávida escritora... ya ni cartas ni nada de nada...
leer entre líneas es complicado...
besos

María dijo...

Haces bien 😊

María dijo...

Usted siempre bebe, Martinis por lo que leo.

;-)

María dijo...

Me encanta tu presencia. Me provocas paz y una sonrisa.

Abrazo de vuelta.

María dijo...

Eso depende del día o de la cosa que se pregunte o...

Recibido ese beso.

María dijo...

Soy un alma vieja en ese aspecto. Adoro las cartas escritas de puño y letra.
Es complicado leer y entender, así, en general.

Besos

Ingrid Dietrich dijo...

Hay que tener cuidado con lo que se desea desde el desconocimiento... Se desea una carta y se accede al laberinto... Y casi nadie sabe leerlo.

María dijo...

Qué cierto. Y entonces llegan las preguntas sin respuesta.

Besazo.