lunes, 16 de marzo de 2020

CONFINADA


De la red
Y de repente el mundo desapareció bajo tus pies y te quedaste flotando en medio de la nada, más o menos estable gracias a las fuerzas planetarias de aquellos hogares que ahora te parecían viables por la forma, pero inalcanzables por la lejanía.

Te diste cuenta de la necesidad de los abrazos, del significado de los besos, de la importancia de las palabras. Todo recobró un sentido en el mismo momento en el que ese "todo" desapareció sin decir nada.

Entraste en un estado de inconsciencia que te trasladó a un hecho puntual: el día de tu nacimiento, la primera bocanada de aire que penetró en tu cuerpo, la sensación de que un corazón nuevo se volvió loco de alegría ante tanta incertidumbre que estaba por venir. Pero sobre todo recordaste el sentir, cómo cambiaba tu piel con el tacto, los miles de nervios activados gracias a unos pocos centímetros que, así como si nada, entraban en contacto.

Allí, confinada, aprendiste el verdadero significado de esa palabra. Ahora sabes que existe el silencio, pero ese silencio que duele, el que se mete en el cerebro y rebota entre los huecos. 

Y echaste de menos, echaste muchísimo de menos tener algo que decir aunque fuera impertinente o molesto, porque te quitaron también la voz terrenal y solo emitías de vez en cuando un chillido interestelar.

No obstante, sigues esperando una respuesta, la vuelta a casa o a otro planeta. Has pensado tanto, que ahora sabes que lo importante no es el sitio, sino las personas que lo habitan y que allanan el camino.  


10 comentarios:

Noelplebeyo dijo...

una suerte el contar con el sustento de saberse levitando


besos

Anónimo dijo...

La importancia del contacto en cualquiera de sus formas, ¿aprenderemos algo de esta situación?

María dijo...

E intentar disfrutarlo...

Besos.

María dijo...

Estoy segura de que cambiará la forma de ver las cosas para muchos. Habrá merecido la pena.

Ingrid Dietrich dijo...

No hay confinamiento para tu alma libre, que vuela...

María dijo...

Qué bien me conoces...

Besazo

Unknown dijo...

Maravillosa descripción...

María dijo...

Palabras que salen de dentro.

Gracias.

Sbm dijo...

Leo siempre tus entradas, creo que he leído la mayoría. Siempre dices mucho por infinitos caminos. Nunca sé cuál tomar; eso no es bueno ni malo, se da a la interpretación; eso no es bueno ni malo, pero me pierdo.

Eso ya no es bueno ni malo. Sólo es.

En el fondo da igual, eres tú la protagonista, yo un mero espectador delante de cien pensamientos sin camino a seguir.

Un abrazo.

PD- Con alguna gente me habría gustado estar ahí, en momentos difíciles. Y también sentir compañía si entre los números y letras de mis tiempos hubiera espacio. Y entre los suyos también.

María dijo...

Creo que todos hemos sentido esa sensación de soledad. Yo solo me adelanto a lo que un día será.

Te pierdes... en cambio yo me encuentro.

Abrazo.